Función Solemne Ntra. Sra. de la Soledad

Hoy a las 20 horas dará comienzo la Función Solemne en honor a Ntra Sra de la Soledad.

Lectura del santo evangelio según san Lucas (14,1.7-11)

Un sábado, entró Jesús en casa de uno de los principales fariseos para comer, y ellos le estaban espiando. Notando que los convidados escogían los primeros puestos, les propuso esta parábola: «Cuando te conviden a una boda, no te sientes en el puesto principal, no sea que hayan convidado a otro de más categoría que tú; y vendrá el que os convidó a ti y al otro y te dirá: «Cédele el puesto a éste.» Entonces, avergonzado, irás a ocupar el último puesto. Al revés, cuando te conviden, vete a sentarte en el último puesto, para que, cuando venga el que te convidó, te diga: «Amigo, sube más arriba.» Entonces quedarás muy bien ante todos los comensales. Porque todo el que se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido.»

Palabra del Señor

Con esta parábola Jesús no trataba solamente de criticar el orgullo de los fariseos en nombre de las reglas de urbanidad, ni tampoco de predicar la modestia. Jesús intervine porque Dios «derriba a los poderosos y levanta a los humildes».  Muy pronto, Jesús se pondrá en el último puesto de la mesa y se arrodillará a los pies de sus discípulos. Es el amor llevado hasta el fin, ahí radica la omnipotencia de Dios, en que todo lo puede en el amor.  Desde entonces vivir para  nosotros es aceptar, recibir, depender y sentirnos dichosos de esta gracia: ser hijos en el Hijo para hacer de nuestra vida una entrega,  un permanente servicio.  ¡Ese es nuestro justo lugar! ¡eso significa subir más arriba!  El reino pertenece a los que vivan esta bendita «locura»: “amar sin medida”

Se podrá seguir en directo la celebración a través del canal de YouTube de la Cofradía

3° Día Triduo Ntra. Sra. de la Soledad

Hoy a las 20.30 horas dará comienzo el Tercer día del Triduo a Ntra Sra de la Soledad.

Hoy ofreceremos esta Eucaristía por nuestro hermano Antonio Jesús Santos, para que nuestro Padre Jesús Nazareno lo acoja en su seno.

Lectura del santo evangelio según san Lucas (14,1-6)

Un sábado, entró Jesús en casa de uno de los principales fariseos para comer, y ellos le estaban espiando.  Se encontró delante un hombre enfermo de hidropesía y, dirigiéndose a los maestros de la Ley y fariseos, preguntó: «¿Es lícito curar los sábados, o no?»  Ellos se quedaron callados. Jesús, tocando al enfermo, lo curó y lo despidió.  Y a ellos les dijo: «Si a uno de vosotros se le cae al pozo el hijo o el buey, ¿no lo saca en seguida, aunque sea sábado?»  Y se quedaron sin respuesta.    

Palabra del Señor

Es sábado. Jesús está invitado en casa de un dirigente fariseo y, como de costumbre, va a denunciar una vez más las prácticas de esos hombres que parecen tan religiosos.  Jesús se inclina ante el hombre con hidropesia porque no puede permitir que siga estando así por más tiempo. Y en cambio estos hombres religiosos no lo han entendido, viven su fe farisaicamente escondidos tras una máscara de honestidad. Sus actitudes aparentemente eran correctas, pero escondían veneno. Terminan utilizando la ley como arma de ataque para eliminar al adversario. El bien se puede utilizar así para el mal. Sin amor al prójimo y sin limpieza de corazón se contaminan los más bellos ideales. Como hicieron los comensales del relato de hoy.  Y ante la evidencia de los hechos optan por callar, justo para no darle la razón a Jesús. ¡Cuántas veces ocurre! Se calla lo bueno de los otros -adversarios o no- si no sirve a los propios intereses. Esta mudez es otra forma de falsificar la verdad. Por ello, Jesús no la pudo pasar por alto ni excusar. 

La Eucaristía de hoy será retransmitida en directo por nuestro canal de YouTube.

2° Día Triduo Ntra. Sra. de la Soledad

Hoy a las 20.30 horas dará comienzo el segundo día del Triduo a Ntra Sra de la Soledad.

Hoy solemnidad de los difuntos, la Eucaristía será ofrecida por todos los hermanos y hermanas fieles difuntos de la Cofradía y especialmente por los hermanos y familiares que nos han dejado este año:

  • Cristóbal Díaz
  • Elisa Rincón
  • Rafaela Rodríguez
  • Angelita Almirón
  • Rafael Mariscal
  • Manuel Pozo
  • María del Carmen Peinado
  • José Cáceres
  • Pepa Buzón
  • Alberto Gallardo
  • Miguel Ángel Gordillo
  • Antonio Jesús Santos

Lectura del santo Evangelio según san Juan (14,1-6)

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Que no tiemble vuestro corazón; creed en Dios y creed también en mí. En la casa de mi Padre hay muchas estancias; si no fuera así, ¿os habría dicho que voy a prepararos sitio? Cuando vaya y os prepare sitio, volveré y os llevaré conmigo, para que donde estoy yo, estéis también vosotros. Y adonde yo voy, ya sabéis el camino.»

Tomás le dice: «Señor, no sabemos adonde vas, ¿cómo podemos saber el camino?»
Jesús le responde: «Yo soy el camino, y la verdad, y la vida. Nadie va al Padre sino por mí.»

Palabra del Señor

Creemos por fe que la muerte no es el final de la existencia humana, sino la entrada en una condición de vida nueva y definitiva.
Creemos en la muerte pero no en la muerte ajada de los cementerios, que hace temblar nuestro corazón y angustia nuestra existencia, sino en la muerte vencida, dada la vuelta por Jesucristo.

Oremos hoy por nuestros difuntos, oremos por los que ya partieron «a las moradas del Padre» y todavía no han sido purificados del todo. Que nuestra oración les sirva de ayuda y consuelo. Pasarán los días, pero nuestro amor y nuestros gestos hacen que se mantengan vivos nuestros recuerdos.

¡No os hemos olvidado hermanos difuntos!

A través de nuestro canal de YouTube podrá seguir en directo la celebración del 2° Día de Triduo.

1° Día Triduo Nuestra Señora de la Soledad

Hoy a las 20.30 horas dará comienzo el primer día de Triduo a Ntra Sra de la Soledad.

Lectura del santo Evangelio según san Mateo (5,1-12)

Viendo la muchedumbre, subió al monte, se sentó, y sus discípulos se le acercaron. Y tomando la palabra, les enseñaba diciendo: «Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los Cielos. Bienaventurados los mansos, porque ellos poseerán en herencia la tierra. Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados. Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados. Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia. Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios. Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios. Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los Cielos. Bienaventurados seréis cuando os injurien, y os persigan y digan con mentira toda clase de mal contra vosotros por mi causa. Alegraos y regocijaos, porque vuestra recompensa será grande en los cielos; pues de la misma manera persiguieron a los profetas anteriores a vosotros.»

Palabra del Señor

Hoy es el día de Todos los Santos. La fiesta de los que ya llegaron: «Una muchedumbre inmensa, que nadie podría contar».

Los santos brillan hoy allá arriba, pero todo empezó aquí abajo, cuando nadie todavía podía imaginar que habían escogido la mejor parte; cuando pasaban desapercibidos o, peor aún, parecía que llevaban las de perder; cuando tomaron el camino difícil, desconcertante de las Bienaventuranzas. Prefirieron la luz a la oscuridad, eligieron lo bello a lo feo, escogieron lo bueno a lo malo y prefirieron la vida a la muerte. Vivieron un hollyowins eterno a un Halloween comercial y fiestero.
Hoy también es el día de todos nosotros, llamados a ser santos, hoy es el día de dar gracias a Dios porque no dejan de apuntar por todas partes brotes de una nueva manera de vivir, al estilo de aquella que Jesús nos presentó como camino hacia el Padre. Gente honrada, amigos de verdad, fieles a la palabra dada, sin odio en el corazón, generosos, compasivos… que buscan la verdad, la bondad y la belleza a la mentira, la maldad y la fealdad.

¡No está del todo este mundo perdido! No en vano lleva ya Dios mucho tiempo trabajando, silenciosamente, el corazón de cada hombre, de todos los hombres, como levadura en la masa y hará crecer esa semilla. Dios hará que ese fermento acabe transformando toda la masa. Y un día el mundo entero, redimido, sonreirá feliz como un inmenso campo llenos de flores abiertas.

¡Felicidades!

La celebración de hoy será retransmitido en directo a través de nuestro canal de YouTube.

3° Día de Triduo en Honor a María Santísima Nazarena

FESTIVIDAD DE LOS DOLORES DE MARÍA SANTÍSIMA

Casi en el final del relato de la crucifixión y muerte de Jesús, el evangelista vive en primera persona los momentos finales de la vida del Maestro. Es testigo privilegiado de cómo se está cumpliendo lo que de “el Mesías” decían las escrituras: «se repartieron sus ropas y echaron a suerte su túnica».

Jesús es consciente que vive sus últimos momentos, los latigazos, las espinas de la corona, las injurias y los clavos han hecho mella en su estado de salud, la pérdida de sangre ha sido cuantiosa.

La mayoría de sus íntimos han desaparecido, solamente su Madre, la hermana de su Madre y María la Magdalena, junto al discípulo que tanto quería, se encontraban cercanos a la cruz, y en un gesto de entrega total encarga a Juan el cuidado de su madre, convirtiéndolo en su propio hijo y a María la constituye en “Madre de todos los creyentes”.

María vive profundamente todo por lo que está atravesando su hijo, siendo fiel a los designios del Padre, cargando sobre sí los pecados del mundo y entregando su vida por la redención de todos; y ella sufre con intenso dolor la entrega total y sin condiciones que Jesús asume hasta sus últimas consecuencias, angustiada por la impotencia que genera no poder ayudarle, salvo ser testigos de su final.

María acepta con amor total la protección de todo el género humano y como a tal la veneramos como Madre, Reina y Señora de todo lo creado.

La Ceremonia dará comienzo a las 20.30 horas con el Ejercicio del Triduo y posteriormente la Santa Eucaristía, será oficiada por nuestro Consiliario, Rvdo. P. D. José Luis Moreno Modelo.

La Eucaristía será ofrecida por nuestros hermanos Antonio Muñoz y Maria Jesús Almoguera, que celebran sus 50 años de vida en común, guiados y ayudados por Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima Nazarena.

2° Día de Triduo en Honor a María Santísima Nazarena

Celebramos hoy la fiesta de la Exaltación de la Santa Cruz. ¡Qué locura! ¡Jesús quiere conquistar a los hombres por la cruz!

El Señor es levantado delante de nuestros ojos para que, al mirarlo, al amarlo, al cuidar de Él, quedemos curados; quiero pensar que, en cada crucificado, el Señor nos atrae hacia Él, para que seamos semejantes a él en ternura, en compasión, en misericordia.
Que luchemos contras todos los que son crucificados hoy a causa del egoísmo y la injusticia de los hombres: hambre, guerras, prostitución, inmigración, trabajo infantil… a los que sufren por la enfermedad y la muerte.

Luchemos contra esas cruces y pongamos en ella el amor, único antídoto que hace retroceder la muerte y el dolor.

La Ceremonia dará comienzo a las 20.30 horas con el Ejercicio del Triduo y posteriormente la Santa Eucaristía oficiada por nuestro Consiliario, el Rvdo. P. D. José Luis Moreno Modelo.

1° Día de Triduo en Honor a María Santísima Nazarena

El mundo de los hombres se ha venido abajo; nace el mundo de Dios: le tierra ha sufrido una revolución. ¡Porque no hay ninguna felicidad en ser pobres, y jamás los que lloran han pedido seguir llorando! Todo está en contra nuestra, pero son bienaventurados aquellos que comprenden el camino del Resucitado. Ellos se mantienen en pie solamente por su fe en la Palabra que transforma el mundo: como acróbatas, cruzan el abismo, y la Palabra, que es frágil como un hilo a los ojos de los hombres, les permite llegar a la otra orilla.
La bienaventuranza y la salvación son gracia.

¡Qué dicha que Dios mismo nos llame bienaventurados! ¿Tu, te sientes así? o, ¿pesa más en tu vida la malaventuranza?.

La Ceremonia dará comienzo a las 20.30 horas con el Ejercicio del Triduo y posteriormente la Santa Eucaristía, que en el día de hoy, será ofrecida por el eterno descanso de nuestra hermana Pepa Buzón Ávila.

Función Solemne en honor a Ntra. Sra. de la Soledad

Lectura del santo Evangelio según san Lucas (16,9-15)

En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: «Ganaos amigos con el dinero injusto, para que cuando os falte, os reciban en las moradas eternas. El que es de fiar en lo menudo, también en lo importante es de fiar; el que no es honrado en lo menudo, tampoco en lo importante es honrado. Si no fuisteis de fiar en el vil dinero, ¿quién os confiará lo que vale de veras? Si no fuisteis de fiar en lo ajeno, ¿lo vuestro quién os lo dará? Ningún siervo puede servir a dos amos: porque o bien aborrecerá a uno y amará al otro, o bien se dedicará al primero y no hará caso del segundo. No podéis servir a Dios y al dinero».
Oyeron esto unos fariseos, amigos del dinero, y se burlaban de él.
Jesús les dijo: «Vosotros presumís de observantes delante de la gente, pero Dios os conoce por dentro. La arrogancia con los hombres, Dios la detesta.»

Palabra del Señor

Jesús, continuando su reflexión sobre el administrador infiel pero astuto, pone ante nuestros ojos dos órdenes de valores, y ante nuestros pasos dos caminos para dirigir nuestras vidas: un camino de muerte y un camino de vida.
El verdadero discípulo es el que administra «sus bienes» en provecho de la humanidad entera. El que almacena «sus bienes» para solo su provecho sirve al Dios «Dinero», en cambio, el verdadero discípulo sirve a Dios. Pues bien, despejemos dudas, estos dos servicios, estos dos cultos, son incompatibles. Para Jesús solo cabe una actitud en el hombre que ha recibido tantos bienes de la tierra y además la gracia y el amor del cielo: compartirlos, ponerlos al servicio de los demás.
No podía ser de otra manera para quien ha recibido el derroche de gracia y ternura que ha supuesto la presencia de Dios en nuestras vidas. ¡Imitemos la gratuidad de Dios!

3° Día de Triduo a Ntra. Sra. de la Soledad

Lectura del santo Evangelio según san Lucas (16,1-8)

En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: «Había una vez un hombre rico que tenía un administrador, el cual fue acusado ante él de haberle malgastado sus bienes. Lo llamó y le dijo: «¿Es cierto lo que me han dicho de ti? Dame cuenta de tu trabajo, porque en adelante ya no serás administrador.» Entonces el administrador se puso a pensar: «¿Qué voy a hacer ahora que me quitan el trabajo? No tengo fuerzas para trabajar la tierra y me da vergüenza pedir limosna. Ya sé lo que voy a hacer, para tener a alguien que me reciba en su casa, cuando me despidan.» Entonces fue llamando uno por uno a los deudores de su amo. Al primero le preguntó: «¿Cuánto le debes a mi amo?» El hombre respondió: «Cien barriles de aceite.» El administrador le dijo: «Toma tu recibo, date prisa y haz otro por cincuenta.» Luego preguntó al siguiente: «Y tú, ¿cuánto debes?» Éste respondió: «Cien sacos de trigo.» El administrador le dijo: «Toma tu recibo y haz otro por ochenta.» El amo tuvo que reconocer que su mal administrador había procedido con habilidad. Pues los que pertenecen a este mundo son más hábiles en sus negocios que los que pertenecen a la luz».

Palabra del Señor

El pánico nunca ha solucionado nada. La sangre fría, la astucia y la audacia son el mejor remedio. Y he aquí que nuestro hombre se aprovecha de unos días de respiro que le concede su amo y empieza a rebajar la deuda de los que le debían a su amo.
Jesús, aunque resulte incomprensible, elogia al astuto administrador precisamente por su astucia, por saber tomar las decisiones oportunas, por tener la audacia suficiente para inventarse el modo de vida que las circunstancia imponen… De la noche a la mañana, todo se le viene abajo, pero el bribón sabe arreglársela.
Y es esa actitud la que Jesús quiere para sus discípulos: saber reaccionar a tiempo y tomar las decisiones oportunas ante las situaciones que la vida nos depara. Jesús quiere que los hijos de la luz brillen por saber discernir lo que se tiene que hacer para que siempre reine la medida abundante de la misericordia. Que la gracia que recibimos de Dios se exprese en nuestras vidas en un amor sin medidas.

2° Día de Triduo a Ntra. Sra. de la Soledad

Lectura del santo evangelio según san Lucas (15,1-10)

En aquel tiempo, solían acercarse a Jesús todos los publicanos y los pecadores a escucharle.
Y los fariseos y los escribas murmuraban entre ellos: «Ése acoge a los pecadores y come con ellos.»
Jesús les dijo esta parábola: «Si uno de vosotros tiene cien ovejas y se le pierde una, ¿no deja las noventa y nueve en el campo y va tras la descarriada, hasta que la encuentra? Y, cuando la encuentra, se la carga sobre los hombros, muy contento; y, al llegar a casa, reúne a los amigos y a los vecinos para decirles: «¡Felicitadme!, he encontrado la oveja que se me había perdido.» Os digo que así también habrá más alegría en el cielo por un solo pecador que se convierta que por noventa y nueve justos que no necesitan convertirse. Y si una mujer tiene diez monedas y se le pierde una, ¿no enciende una lámpara y barre la casa y busca con cuidado, hasta que la encuentra? Y, cuando la encuentra, reúne a las amigas y a las vecinas para decirles: «¡Felicitadme!, he encontrado la moneda que se me había perdido.» Os digo que la misma alegría habrá entre los ángeles de Dios por un solo pecador que se convierta.»

Palabra del Señor

El capítulo 15 de Lucas es un capítulo consagrado todo a la misericordia y a la alegría de Dios cuando “recupera” a los que se habían alejado de su corazón de Padre.
Solo Jesús podía hablar así de Dios porque hablaba por experiencia. Y ciertamente desconcierta que todo un Dios se comporte así, ¿a quién se le ocurre tal imprudencia de dejar todo para ir en busca de una oveja que no está seguro de encontrar? o ¿vaciar toda una casa para buscar una simple moneda?
Estos gestos “inesperados o imprudentes” hablan de esa pasión de Dios por el hombre, de hacer todo lo posible porque cada hombre vuelva a encontrar en su corazón de Padre la alegría, la paz y la seguridad para hacer en condiciones el camino de la vida ¿Quién pueda hablar del Dios de Jesús sin decir que el amor le hace cometer locuras?
“Alegraos conmigo, porque he hallado la oveja que se me había perdido”
Sentir la misericordia divina es motivo de alegría, da sentido a la vida y nos permite mirar al mundo de otra manera. Por eso hay que compartirlo con los demás. No podemos guardarnos para nosotros la felicidad de saber que podemos comenzar de nuevo el camino, porque Él ha borrado nuestros pecados y nos permite de nuevo escribir en la página en blanco de nuestra vida.