María nos invita a ponernos en manos de Jesús Nazareno

«Haced lo que él os diga»

María nos invita a ponernos en manos de Jesús Nazareno, de confiar en su intervención divina. Acudimos a ella en busca de consuelo, de amor, de cercanía y obtenemos mucho más de los que ofrecemos, María solucionó las necesidades de los demás, poniéndolas en manos de Jesús Nazareno.

Con este humilde gesto de compartir una oración, buscamos la intercesión de María Santísima Nazarena para que ilumine nuestras plegarias de modo que puedan salir de nosotros mismos, de nuestras preocupaciones y problemas, y nos abra el corazón a lo que nos quiere decir.

Oración para hoy miércoles 28 de octubre a las 21:00 h.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amen

Padre nuestro, que estás en el cielo,
santificado sea tu Nombre;
venga a nosotros tu reino;
hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día;
perdona nuestras ofensas como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación y librarnos del mal. Amén.

Dios te salve, María,
llena eres de gracia;
el Señor es contigo.
Bendita Tú eres
entre todas las mujeres,
y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús.
Santa María, Madre de Dios,
ruega por nosotros, pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Madre Nazarena, acudimos a ti hoy como hijos tuyos que somos.
Te pedimos que intercedas por nosotros ante Jesús Nazareno, como lo hiciste en las bodas de Caná. Ruega por nosotros, Madre amorosa, y obtén para nuestra Congregación hospitalaria y nuestra Residencia y por aquellos que están afectados de esta enfermedad, te pedimos que les concedas la gracia de la sanación y la liberación. Escucha los gritos de aquellos que son vulnerables y temerosos, seca sus lágrimas y ayúdalos a confiar, Madre
Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén

Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén

Nuestros Sagrados Titulares los protejan y los cuiden.