Altar del Beato Padre Cristóbal en el Colegio Jesús Nazareno

Hoy por la mañana se ha finalizado el montaje del Altar con la imagen del Beato Cristóbal de Santa Catalina que la Cofradía ha dispuesto en el Colegio de Jesús Nazareno con motivo de la celebración, el próximo día 11 de febrero, del 349 Aniversario de la Fundación de la Congregación de las Hermanas Hospitalarias de Jesús Nazareno, a la que históricamente ha pertenecido el Colegio de Jesús Nazareno, aunque actualmente se encuentre cedido a la Fundación Diocesana Santos Mártires de Córdoba.

Tradicionalmente la comunidad educativa del colegio Jesús Nazareno ha conmemorado la festividad del Beato Padre Cristóbal con una Eucaristía y posteriormente se reparten tortas y chocolate a los alumnos.

Este año la Cofradía ha tenido el inmenso placer de preparar el Altar con la imagen del Beato, propiedad de la Cofradía, una de las primeras obras del imaginero Alfonso Castellano Tamarit y que fue donada a la Cofradía por su autor.

Evangelio 5° Domingo del Tiempo Ordinario

Lectura del santo evangelio según san Lucas (5,1-11):

En aquel tiempo, la gente se agolpaba en torno a Jesús para oír la palabra de Dios. Estando él de pie junto al lago de Genesaret, vio dos barcas que estaban en la orilla; los pescadores, que habían desembarcado, estaban lavando las redes.
Subiendo a una de las barcas, que era la de Simón, le pidió que la apartara un poco de tierra. Desde la barca, sentado, enseñaba a la gente.
Cuando acabó de hablar, dijo a Simón:
«Rema mar adentro, y echad vuestras redes para la pesca».
Respondió Simón y dijo:
«Maestro, hemos estado bregando toda la noche y no hemos recogido nada; pero, por tu palabra, echaré las redes».
Y, puestos a la obra, hicieron una redada tan grande de peces que las redes comenzaban a reventarse. Entonces hicieron señas a los compañeros, que estaban en la otra barca, para que vinieran a echarles una mano. Vinieron y llenaron las dos barcas, hasta el punto de que casi se hundían. Al ver esto, Simón Pedro se echó a los pies de Jesús diciendo:
«Señor, apártate de mí, que soy un hombre pecador».
Y es que el estupor se había apoderado de él y de los que estaban con él, por la redada de peces que habían recogido; y lo mismo les pasaba a Santiago y Juan, hijos de Zebedeo, que eran compañeros de Simón.
Y Jesús dijo a Simón:
«No temas; desde ahora serás pescador de hombres».
Entonces sacaron las barcas a tierra y, dejándolo todo, lo siguieron.

Palabra del Señor

JESÚS ELIGIÓ PESCADORES

La gente se agolpaba en torno a Jesús para oír la Palabra de Dios. Es significativo el comienzo de esta escena. Jesús comprueba que la «gente» está interesada en la Palabra de Dios, y por eso le buscan. Debía ser un número no pequeño de personas, ya que se agolpan. Reunir a la gente alrededor de la Palabra de Dios y hablarles de ella es el primer paso de Jesús en su todavía solitaria tarea misionera. Y lo mismo harán después sus discípulos, tanto los que han sido sus compañeros, como otros muchos que no lo conocieron en persona, incluido San Pablo. San Lucas subraya que todo comienza por recibir y escuchar juntos la Palabra de Dios. También hoy. Los discípulos de Jesús son/somos los que se reúnen y escuchan juntos la Palabra de Dios… porque sentimos que puede orientar nuestras vidas, darnos consuelo, proponernos retos, sacarnos de lo de siempre hacia un lugar mejor.

UN PEQUEÑO FAVOR

En este escenario, Jesús busca el mejor modo de atender a tanta gente, y agolpados no es el mejor modo. Entonces decide pedir a alguien un pequeño servicio, un favor. Entre todos los pescadores que estaban lavando sus redes, fue Pedro a quien se dirigió Jesús. No le hizo un examen de sus virtudes, sino un examen de disponibilidad. Ya se encargará Él más adelante, cuando acepte seguirle, de ir puliendo lo que sea necesario. La generosidad y disponibilidad de Pedro, que acepta interrumpir sus tareas cotidianas, es la que permitió que Jesús pudiera predicar a gusto su Palabra.

Antes de hacer propuestas mayores, más serias, más importantes, Jesús parece «tantearnos» pidiendo cosas más sencillas. Suponen una incomodidad, un trastorno de nuestros planes, de nuestros horarios, de «lo que tenemos que hacer». Y nuestra respuesta ante su sencilla petición… condiciona lo que pueda venir después. Quizá este primer acercamiento del Señor ocurre cuando nos piden que echemos una mano para la catequesis, o para preparar una celebración, o para atender a alguien que lo necesita, quizá un voluntariado o una experiencia misionera más prolongada, o…

Jesús tiene claro desde el principio, que para su inmensa tarea precisa ayuda. Y empieza buscando personas que le hagan pequeños servicios, pequeñas renuncias, un simple favor… Así es como empieza a «elegirnos». Es su manera discretísima de entrar en comunicación con nosotros, haciéndonos ver la necesidad que tiene de nosotros, para poder atender a tanta gente que le necesita, para poder hablarles al corazón. Empieza pidiéndonos un poco de tiempo, nuestro buen hacer, o alguna de las cosas que tenemos. Sólo si se lo damos, sin mayores resistencias, dedicará luego su tiempo y su poder para conseguirnos cuanto no alcanzamos nosotros solos. En el caso de Pedro, al terminar Jesús su discurso, quiso recompensar su gesto y el tiempo que le había «quitado». Pedro había tenido mala suerte aquella noche: bregando y afanándose con su barca, sin conseguir nada. Le mandó Jesús remar mar adentro (literalmente, «hacia la zona profunda del mar») y ponerse a pescar.

REMA MAR ADENTRO

La invitación de Jesús “rema mar adentro” fue de lo más inoportuno. Era como una vuelta de tuerca más. Con la fatiga de toda una noche, y con la desilusión de no haber conseguido nada, a pesar de ser un pescador experimentado, y cuando sus compañeros se iban retirando a descansar, un desconocido -«carpintero» para más señas-, le dice que lo intente de nuevo, y que vuelva al mar.

Jesús suele acercarse a los hombres proponiendo extrañas exigencias, peticiones aparentemente absurdas o inoportunas. ¿Pero cómo se le ocurre que salgamos a pescar «de día»? ¡Cualquier pescador del mar de Galilea sabe que las horas de pescar son las de la noche! Lo que aquí se nos explica es que Jesús quiere sacarnos de nuestras rutinas, de nuestras experiencias de vacío después de haber peleado tanto sin conseguir apenas nada. Busca personas dispuestas a «moverse» y a meterse al mar, a «mojarse», que no tengan miedo ni pereza para dejar la tranquila orilla donde nunca pasa nada, y desde luego, donde nunca pescaremos nada. Con el lenguaje de la psicología de hoy, podríamos decir que Jesús nos invita a salir de nuestra «zona de confort”, de nuestras cosas conocidas, para que descubramos y consigamos otras mejores.

Pedro, que tenía un corazón enorme, debió escuchar con atención aquella predicación de Jesús en el Lago. Y comprendió que «escuchar» no era suficiente. Y decide confiar: «por tu palabra echaré las redes». De nuevo la «Palabra de Jesús» que pide «acción». Esa Palabra que puede parecernos absurda, incómoda, fuera de lugar… cuando la escuchamos en la oración, en la liturgia… Pero «por tu Palabra», porque tú lo dices y lo pides… voy a fiarme. Y llega el éxito por el que tanto nos habíamos fatigado, obtenemos más de lo que hubiéramos imaginado. No sólo unas redes llenas, sino una vida «distinta», que importa mucho más.

El “rema mar adentro” de Jesús a Pedro tiene que convencernos de que, si deseamos ver milagros hoy, si queremos llenar la barca, deberíamos obedecer (literalmente «escuchar la Palabra») como Pedro, tener su misma confianza. Quien se arriesga a vivir y actuar según la palabra de Jesús, podrá presenciar milagros. Puede que no tengamos que dejar de hacer lo que hacemos siempre, pero sí hacerlo de otra manera. Puede que sin abandonar la propia profesión, y usando la misma barca de siempre. O puede que nos llame a algo imprevisto, sorprendente y mucho mejor.

PESCADORES DE HOMBRES

Lo de «pescar hombres» era un dicho popular que significaba sacar a uno de un peligro grave. La llamada de Jesús hará descubrir a Pedro que la felicidad, la plenitud, la «barca» realmente llena no es la que acumula abundantes peces que vender en el mercado… sino «encontrar personas», rescatar del mal/mar a las personas. Son las personas las que tienen que ocupar el centro de nuestra vida y de nuestras tareas. Personas heridas, descartadas, marginadas, necesitadas, enfermas… ¡Hay tantas!

En algunos casos la llamada del Señor será total: a dejarlo todo para estar con ellas y atenderlas. Pero lo de priorizar en nuestra vida diaria y hacer nuestra preocupación principal sean las personas, sobre todo las que sufren, las que están mal… es una llamada para todos.

En tiempos de Sínodo está bien que subrayemos que la llamada de Jesús no es para unos pocos selectos y cualificados (Pedro y sus compañeros no lo eran), sino que la Barca de la Iglesia cumplirá su misión con la participación de todos, organizándonos mejor, poniendo la mirada en el mar (y no en la barca), echando por la borda tanto lastre que se ha ido acumulando, para poder navegar ligeros, llevados por el Viento del Espíritu, y dejando que el Jesús que viaja a bordo nos diga dónde y cuándo hemos de pescar… aunque «siempre» lo hayamos hecho de otra manera.

Restauración de los Ángeles de la Peana de Jesús Nazareno

El pasado mes de enero, el orfebre cordobés Emilio León estuvo en nuestra Casa Hermandad para hacer entrega a nuestro Hermano Mayor de tres Ángeles ceriferarios que escoltan la Peana de Plata sobre la que procesiona Nuestro Padre Jesús Nazareno, después del intenso trabajo de conservación a los que fueron sometidos a los largo del pasado año, mediante la limpieza y consolidación de todas las piezas afectadas por el normal uso de los mismos, para devolver su esplendor a estas fantásticas piezas que forman parte del rico patrimonio de la Cofradía.

Con la entrega de estos ángeles se completa la restauración del juego completo, que ya se inició tras la Cuaresma de 2018, cuando se produjo la fractura del brazo de uno de ellos.

Recordamos que los Ángeles de plata forman parte de la peana obra maestra de la platería cordobesa, obra de Cristóbal Sánchez Soto y que en marzo de 1780 el conde de la Fuente del Saúco donaba para en ella procesionar a Nuestra Señora de la Soledad. Actualmente es trono permanente del Señor de los señores, a quien cuadra a la perfección el programa iconográfico y simbólico. En el primer cuerpo, Ecce Homo, Jesús ante Caifás, Oración en Getsemaní, Descendimiento, Calvario y Nazareno. En el segundo, columna; cruz, lanza con título y caña; flagelo y haz de ramas; escalera, esponja y lanza; tenazas y martillo; corona y clavos.
La compleja pieza, de plata en su color, presenta planta rectangular con orejetas en esquinas y centros que estructura una base ricamente moldurada, sobre la que se eleva el primer cuerpo, decreciente y con perfil en gola, que culmina en planta hexagonal compartida con el segundo cuerpo, de perfil en escocia. Una cincelada retícula vegetal orna el campo sobre el que se disponen, orlados por exquisita decoración, doce medallones con las escenas y atributos citados, perfectamente adaptados los inferiores a la convexidad de la superficie, los superiores a la concavidad. Sobre las orejetas angulares, cuatro de los ocho ángeles ceroferarios de plata que ostentó en origen el soberbio conjunto.

Estos trabajos se han podido acometer gracias a la subvención que el Exmo. Ayuntamiento de Córdoba concedió en el pasado año para trabajos de conservación a las Cofradías Cordobesas a través de la Agrupación de Hermandades y Cofradías de Córdoba.

Presentación del Cartel y Actos del 350 Aniversario de la Congregación

En la tarde-noche de ayer, una nutrida representación de la Cofradía estuvo presente en la Iglesia Hospital de Jesús Nazareno en el acto que las Hermanas Hospitalarias han organizado para presentar los Actos y el cartel del 350 Aniversario de la fundación de la Congregación que darán comienzo el próximo día 11 de febrero.

El acto contó con la participación de la Hermana María del Carmen Pérez, Superior de la Casa de Córdoba y la Hermana Josefina Peñas, Superior General de la Congregación. Nuestro Hermano Fermín Pérez fue el encargado de dar pie al presentador de la obra, el Rvdo. P. D. Juan José Romero Coleto, Hermano de la Cofradía, Párroco de Nuestra Señora de Belén y persona muy vinculada a la casa de Jesús Nazareno desde hace muchos años.

La música estuvo presente de la mano de Antonio y Lucia, dos jóvenes violinistas, cofrades de la Hermandad de la Virgen de Villaviciosa de Córdoba, que interpretaron varias piezas musicales.

El Acto fue retransmitido en directo a través del canal de YouTube de la Cofradía y pueden volverlo a ver en el siguiente enlace:

La Cofradía quiere estar muy presente participando y apoyando todas las iniciativas que lleven a cabo las Hermanas con motivo de esta efeméride tan importante, e invita a todos sus hermanos a colaborar de forma activa con la Congregación en todas las iniciativas.

Designación del Exaltador y Presentador del Cartel para la Cuaresma 2022

La Junta de Gobierno sigue trabajando intensamente para dar forma a todos los actos que la Cofradía va a organizar en la próxima Cuaresma 2022.

El primero de estos actos que tradicionalmente ha servido como antesala y anuncio de la Cuaresma Nazarena, es la Exaltación y Presentación del Cartel anunciador de la Cuaresma. Este año 2022 tendrá lugar D.m. el próximo día 27 de febrero a las 13:00 h. en la Iglesia Hospital de Jesús Nazareno.

La Junta de Gobierno de la Cofradía ha decidido que la persona encargada de exaltar a nuestros Sagrados Titulares sea nuestro Hermano D. Jesús Daniel Carmona Gutiérrez, auxiliar del equipo de Capataces de Nuestro Padre Jesús Nazareno.

Daniel Jesús Carmona Gutiérrez

Daniel Jesús Carmona Gutiérrez nace el 19 de Agosto del año 1976 en la localidad de Puente Genil.  Cursa sus estudios en la Escuela de Artes Aplicadas y Oficios Artísticos Mateo Inurria de Córdoba en la especialidad de restauración, obtiene la FPO de Administración Comercial, Creación y Gestión de empresas así como la titulación de Comunity Management por la UNED. Actualmente ejerce como CEO de Costales Er tío der saco y Comunity Manager.

Desde niño ya denotaba especial predilección por todo lo relacionado con la Semana Santa, y solía acompañar en las filas de nazarenos durante su discurrir penitencial a imágenes como “La Amargura”, “El Preso” o “El Terrible”.  Su inquietud por el mundo cofrade motiva que en 1991 entre a formar parte de la cuadrilla de hermanos costaleros del Señor de los Afligidos, donde finalmente asienta y afianza su fe, siempre bajo la atenta mirada del Señor de sus amores.  Es bajo este paso donde Daniel “echa los dientes” y tiene su primer contacto con el mundo del costal y la trabajadera, realizando su primera Estación de Penitencia. Desde entonces hasta la actualidad han sido numerosas las cuadrillas donde ha desarrollado el oficio del costal, tanto en su ciudad natal, Córdoba capital y múltiples lugares de la geografía andaluza, y que ha compaginado a lo largo de los años con su labor al frente del paso del Señor de los Afligidos (1994-2016) o de Nuestro Padre Jesús de las Penas (2001-2010) también de la localidad de Puente Genil entre otros, o actualmente formando parte del equipo de capataces de Nuestro Padre Jesús Nazareno desde el año 2019.

En el año 2002 pronuncia el V Pregón del Costalero en el Ex-Convento de Ntra. Sra. de la Victoria de Puente  y en 2007 el Pregón de la Semana Santa de Puente Genil en Madrid. En el último Salón Cofrade de Córdoba expuso la Conferencia “La Purísima Concepción: Dogma, Iconografía e historia de 361 años de devoción en Puente Genil”. Ha participado en numerosas mesas redondas de capataces y costaleros y en 2014 ofrece la charla “Origen, Historia y herramientas del costalero” en la Casa Hdad. de Ntro. P. Jesús Nazareno de la localidad cordobesa de Santaella.

En 2015 exalta el Sábado de Pasión de la Agrupación Parroquial de Ntro. P. Jesús del Amor en su Prendimiento y María Stma. de la Concepción. Será este mismo año cuando pronuncié el pregón de la Hdad. del Rocío de Cabra, en 2018 pregona la gloria de Ntra. Sra. del Rocío y realiza la obra que anunciará la Navidad en su hermandad de Écija.

Como buen andaluz y persona de costumbres arraigadas, fue componente del Coro de la Hdad. del Rocío de Puente Genil, ha acompañado a cuadros flamencos y participado en Romerías por la geografía andaluza.  Su devoción a la imagen mariana del Rocío, propicia que Daniel acompañe en su peregrinar al Simpecado de la Hdad. de Puente Genil hasta tierras almonteñas como tamborilero durante diez años. Actualmente acompaña al Simpecado de su Hdad. de Écija y desde 1991 no ha faltado un Lunes de Pentecostés ante la Stma. Virgen.