Igualá de la Cuadrilla del Beato Padre Cristóbal

El próximo viernes, 13 de enero a las 21:00 h. en la Casa de Hermandad, en la calleja del Rehoyo (plaza de San Agustín) se cita a todos los costaleros que deseen formar parte de la Cuadrilla que portará, el próximo 12 de Febrero, la imagen del Beato Padre Cristobal de Santa Catalina en su Salida Procesional.
Se ruega puntualidad y acudir con calzado negro de salida.

Evangelio Solemnidad del Bautismo de Jesús

Lectura del santo evangelio según san Mateo (3,13-17)

En aquel tiempo, vino Jesús desde Galilea al Jordán y se presentó a Juan para que lo bautizara.
Pero Juan intentaba disuadirlo diciéndole:
«Soy yo el que necesito que tú me bautices, ¿y tú acudes a mí?».
Jesús le contestó:
«Déjalo ahora. Conviene que así cumplamos toda justicia».
Entonces Juan se lo permitió. Apenas se bautizó Jesús, salió del agua; se abrieron los cielos y vio que el Espíritu de Dios bajaba como una paloma y se posaba sobre él.
Y vino una voz de los cielos que decía:
«Este es mi Hijo amado, en quien me complazco».

Palabra del Señor

La Navidad termina hoy con la fiesta del Bautismo del Señor. Jesús, adulto ya, va a comenzar su misión.
Jesús como uno más, se pone a la fila de los pecadores para recibir el bautismo de Juan por el agua del Jordán. Entra en el agua como un hombre más que en ella buscara sepultar sus pecados para salir renovado.
Pero se produce un efecto sorprendente: no es el bautismo el que santifica a Jesús, sino que es Jesús el que santifica el bautismo. Al entrar en él lo ilumina por dentro, lo transforma y se convierte para nosotros el inicio a una vida nueva porque es el Hijo amado De Dios. Es la misma voz del Padre la que nos lo presenta: “Éste es mi Hijo, el amado, mi predilecto”. Es como si dijera Dios: Es el rostro humano, reconocible, de mi amor. Es mi Palabra, hecha pequeña palabra vuestra. Es vuestro hermano, sí, pero también vuestro Señor. Es el resultado, no lo olvidéis, de muchos milagros juntos, es el fruto de un esfuerzo todopoderoso para hacernos comprensibles mis designios. Es vuestra gran oportunidad. El camino definitivo para que nadie se pierda, sino que haya vida abundante para todos.
Vale la pena, amigos, que lo reconozcamos. Que lo escuchemos. Que lo sigamos.
Necesitamos escuchar esta voz, necesitamos poner mirada atenta, oído vigilante a Jesús, a su vida y a su Palabra, pues solo así creceremos y viviremos verdaderamente como hijos de Dios.
¡Renueva hoy tus promesas bautismales! !vive con más pasión y entrega tu bautismo, tu ser hijo y entones, te lo aseguro, serás feliz.

¡Buen Domingo!

Evangelio solemnidad del Dulce Nombre de Jesús

Lectura del santo Evangelio según san Juan (1,29-34)

Al día siguiente, al ver Juan a Jesús que venía hacia él, exclamó: «Este es el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo. Este es aquel de quien yo dije: «Trás de mí viene un hombre que está por delante de mí, porque existía antes que yo.» Yo no lo conocía, pero he salido a bautizar con agua para que sea manifestado a Israel.»
Y Juan dio testimonio diciendo: «He contemplado el Espíritu que bajaba del cielo como una paloma, y se posó sobre él. Yo no lo conocía, pero el que me envió a bautizar con agua me dijo: «Aquél sobre quien veas bajar el Espíritu y posarse sobre él, ése es el que ha de bautizar con Espíritu Santo.» Y yo lo he visto, y he dado testimonio de que éste es el Hijo de Dios.»

Palabra del Señor

Con la mirada todavía puesta en el Niño de Belen, el Evangelio de hoy pone en boca del Bautista una confesión de fe que ha pasado a formar parte de la vida de todos los creyentes: “Éste es el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo”.

La escuchamos en cada Eucaristía, la repite el sacerdote antes de la comunión. Quizá por eso nos hemos acostumbrado y no nos asusta la grandeza de este Misterio de amor que encierra. Es que nos acostumbramos muy pronto al Misterio. Como que tuviéramos derecho a ello.

Quizá nosotros, desde la infancia, tenemos la suerte de escuchar esas palabras, si no cada día, sí cada domingo, y a fuerza de oírla y repetirla nos hemos acostumbrado a ella, y en cambio, estamos llamados a hacerlas vida. Si el Cordero de Dios, el Esperado, el Mesias está entre nosotros quiere decir que Dios ha venido a quedarse para siempre: ¡Corre por nuestras venas la savia del amor eterno de Dios y eso se nos tiene que notar!

¡Feliz día del Dulce Nombre de Jesús!

Como preceptúan nuestros Estatutos Cofrades, hoy celebraremos la Solemnidad del Santísimo Nombre de Jesús. Debemos invocarlo con confianza plena de que obtendremos toda bendición y gracia en esta vida terrenal y futura.

Nos reuniremos en torno a la mesa del Señor, hoy a las 20.30 hrs en nuestra Iglesia de Jesús Nazareno, para celebrar en comunidad esta Festividad tan importante para todos nosotros.

Festividad del Dulce Nombre de Jesús

El próximo, martes, día 3 de enero celebraremos en la Iglesia Hospital de Jesús Nazareno a las 20:30 h, la Festividad del Dulce Nombre de Jesús, como preceptúan nuestros Estatutos. Estará presidida por nuestro Consiliario el Rvdo. P. D. José Luis Moreno Modelo.

Solemnidad de Santa María Madre de Dios

Lectura del santo evangelio según san Lucas (2,16-21):

En aquel tiempo, los pastores fueron corriendo hacia Belén y encontraron a María y a José, y al niño acostado en el pesebre. Al verlo, contaron lo que se les había dicho de aquel niño.
Todos los que lo oían se admiraban de lo que les habían dicho los pastores. María, por su parte, conservaba todas estas cosas, meditándolas en su corazón.
Y se volvieron los pastores dando gloria y alabanza a Dios por todo lo que habían oído y visto, conforme a lo que se les había dicho.
Cuando se cumplieron los ocho días para circuncidar al niño, le pusieron por nombre Jesús, como lo había llamado el ángel antes de su concepción.

Palabra del Señor

El primer día del año civil, los cristianos celebramos la fiesta de Santa María, Madre de Dios: «A los ocho días de nacer, circuncidaron al niño y le llamaron Jesús-salvador». Y en este día también la Iglesia celebra la jornada mundial por la Paz bajo el lema: “Nadie puede salvarse solo. Recomenzar desde el COVID-19 para trazar juntos caminos de paz»
Este Dios nuestro trae con su nacimiento el don de la paz.
Quizás este primer día del año nuevo pasará por alto estos dos acontecimientos porque todos deseamos ardientemente que este primer día del año nuevo sea el primero de muchos que traigan la tan deseada paz a ucrania, expresión del fracaso de toda la humanidad, y que las alargadas sombras de la pandemia, que nos ha sumido en una crisis, sanitaria, social y económica se disipen totalmente.
Pero bien pensado, hasta que llegue la victoria ante esta guerra absurda, qué mejor don que saber vivir en paz en estos tiempos de incertidumbre, de poder caminar en el nuevo año anhelando un mundo más fraterno, más solidario que ponga en el centro de sus intereses lo esencial: la vida y la salud de cada uno de los habitantes de este mundo.
Que Dios, en este año, mueva los corazones de todos los hombres, nos cure de la ceguera y nos dé el don precioso de amarnos como hermanos, verdadero fruto de La Paz.

¡Feliz año 2023!