La Fiesta de la Ilusión

Son las 19:30 h, los pocos niños que ya se encuentran en el local de la Cofradía preguntan incansablemente si falta mucho para que llegue el Paje. Entre saltos, gritos y carreras intentan hacer que el tiempo pase mucho más rápido.

De repente se escuchan tambores, todos los presentes se agolpan a las puertas del local para ver pasar a la caravana del Cartero Real de la hermandad del Cristo de Gracia, que a ritmo de tambores y cornetas va repartiendo caramelos por las calles del barrio.

Una vez que se despejó la calle y los tambores dejaron de escucharse, la incesante batería de preguntas de los niños reanudaron con más insistencia: ¿A que hora llega el Paje? ¿Que hora es? ¿Falta mucho?… Nunca se hicieron tan largos los 15 min que tardó el Paje Real en aparecer por la puerta de la Cofradía, acompañado de sus 3 ayudantes.

En ese momento en el local de la Cofradía no cogía un alfiler, los niños saltaban de alegría ansiosos por conocer al Paje, algunos con sus cartas, otros espectantes por conocer que regalos les habrían traído.

Uno por uno fueron acercándose al Emisario Real y dándole a conocer cuáles eran sus deseos, si se habían portado bien, haciéndose una fotografía con él y recogiendo los presentes que Sus Majestades les habían enviado con su Emisario de confianza.

En la puerta del local los niños con sus padres intentaban adivinar qué sería ese paquete envuelto en colores vivos, no obstante disfrutaban jugando con un globo, o contando la cantidad de caramelos que había podido recoger.

Una de las palabras más escuchadas ayer fue: gracias, y ese es el mejor regalo de todos, el que nos trajo el Paje Real a los cofrades de Jesús Nazareno, poder ver la ilusión de los niños que ayer disfrutaron de una tarde de magia y esperanza. Ese es nuestro mayor regalo, las caras donde se refleja que todos los esfuerzos valen la pena.

Mil razones para continuar

En estos días la Cofradía del Nazareno ha completado el reparto de leche entre las familias más vulnerables del barrio, con la entrega directa o en colaboración con el banco de alimentos de Cáritas Parroquial, así como a la Casa de Acogida de las Adoratrices.

El Nazareno, siempre fiel a la actitud del Beato Padre Cristóbal de Santa Catalina cuyo único deseo era servir a Dios sustentando pobres, asume desde su origen el carácter asistencial y de compromiso con los que sufren como una seña irrenunciable de su identidad.

Con este compromiso se organizan campañas de captación de alimentos a lo largo de todo el año. En concreto, en los últimos meses y dentro de estas iniciativas solidarias, se han puesto en marcha algunas acciones con el objeto de propiciar la recogida de leche, entendida como una necesidad básica. Además de otros alimentos esenciales en la dieta infantil como zumos, cacao, galletas, cereales, aceite, etc.

Estas iniciativas han tenido como fruto la recogida de más de 1000 litros de leche.

Desde aquí queremos agradecer la ayuda de hermanos y costaleros, así como a las familias del Colegio Jesús Nazareno, quienes nuevamente han atendido la llamada de la Vocalía de Caridad en apoyo a los proyectos solidarios puestos en marcha.

Una mañana en la Cofradía

Esta mañana la Cofradía ha estado muy presente en el Colegio Jesús Nazareno y en la Residencia.

Desde las 10:00h un grupo de hermanos han estado preparando junto a algunos mayores de la Residencia una migas para compartirlas todos juntos.

Otro grupo ha estado participando con una mesa informativa sobre la donación de médula ósea, en la jornada de convivencia en el Colegio de Jesús Nazareno con motivo de la fundación de la Congregación de Hermanas Hospitalarias de Jesús Nazareno por parte del Beato Padre Cristóbal de Santa Catarina.

Y el equipo de Priostría y Mayordomía ha estado realizando labores de limpieza y conservación del patrimonio con vistas a la próxima Cuaresma.

Todos juntos trabajando para que la Cofradía está muy viva y presente.

Buen trabajo a todos.

Propuesta Obra Social conjunta de las Hermandades y Cofradías de Córdoba

La Cofradía del Nazareno, a través de la vocalía de caridad, ha presentado esta semana su propuesta de proyecto social para el destino de los fondos de la Obra Social Conjunta de las Hermandades de Córdoba, en la convocatoria de 2018, cuyo plazo de presentación expira el próximo 30 de noviembre.

Se trata de una iniciativa de inserción social que consiste en un taller de promoción de la mujer, propuesto y desarrollado por la Parroquia San Ignacio de Loyola. El proyecto va dirigido a mujeres del barrio en situación de exclusión social. Mujeres
que se conoce su situación de precariedad a través de Cáritas parroquial.

Son un total de quince mujeres de edades comprendidas entre los 22 a 45 años, con una fuerte carga familiar, algunas de ellas separadas, abandonadas, maltratadas en situación económica precaria. No disponen de los bienes básicos
para vivir dignamente, falta de alimentos, corte de luz y agua. Junto a toda esta situación de indigencia, a pesar de todo, es sorprendente la fuerza, las inquietudes que tienen y las ganas de aprender y de participar.

El proyecto se desarrolla mediante talleres de manualidades, de autoestima y formación en valores, encuentros lúdicos y de convivencia, visitas culturales, exposición y venta de trabajos realizados en el taller. Con la intención de alcanzar los objetivos de potenciar las relaciones personales y el trabajo en equipo, potenciar
la expresión y creatividad, desarrollo de habilidades, ayudarles en aumentar la autoestima, fomentar la integración en el barrio y la importancia de la participación
ciudadana.

Esta propuesta encaja perfectamente con el espíritu de nuestra cofradía, porque es precisamente con el propósito de socorrer al gran número de mujeres hambrientas y enfermas que por aquel entonces había en la ciudad, el Padre Cristóbal funda el
hospital de Jesús Nazareno en el año1673.

En la actualidad la Cofradía de Jesús Nazareno, siempre fiel a la actitud y al deseo del Beato Padre Cristóbal de “servir a Dios sustentando pobres”, asume el carácter asistencial y de compromiso con los que sufren como una seña irrenunciable de identidad. Fruto de este compromiso y del interés por descubrir las situaciones de sufrimiento presentes en nuestro entorno e intentar generar respuestas concretas ante las mismas, surge el apoyo al proyecto que aquí presentamos.