Festividad del Beato Padre Cristóbal

Hoy celebramos la Festividad del Beato Padre Cristobal de Santa Catalina.
¡Nos unimos a las Hermanas Hospitalarias en la Fiesta de nuestro Padre Cristóbal!. A las 11 horas, en la Capilla de la Residencia, tendrá lugar Santa Misa en honor del Beato, a la que están invitados todos los hermanos y devotos. El acceso será por la Residencia de Jesús Nazareno.
¡Su ejemplo e intercesión nos ayuden a caminar tras los pasos del Nazareno!

Evangelio Festividad del Beato Padre Cristóbal de Santa Catalina

Lectura del santo evangelio según san Mateo

Aquel día salió Jesús de casa y se sentó junto al mar. Y acudió a él tanta gente que tuvo que subirse a una barca; se sentó y toda la gente se quedó de pie en la orilla.
Les habló muchas cosas en parábolas:
«Salió el sembrador a sembrar. Al sembrar, una parte cayó al borde del camino; vinieron los pájaros y se la comieron.

Otra parte cayó en terreno pedregoso, donde apenas tenía tierra, y como la tierra no era profunda brotó enseguida; pero en cuanto salió el sol, se abrasó y por falta de raíz se secó.

Otra cayó entre abrojos, que crecieron y la ahogaron. Otra cayó en tierra buena y dio fruto: una, ciento; otra, sesenta; otra, treinta.
El que tenga oídos, que oiga».

Palabra del Señor

El texto que la liturgia nos presenta hoy nos narra la llamada del profeta Jeremías, sus luchas a la hora de responder y la misión que se le encomienda. Dios lo elige antes de ser engendrado y lo consagra antes de nacer. Lo nombra profeta de los gentiles y él, sobrecogido de temor y temblor, se escuda en que no sabe hablar por su corta edad. Del mismo modo, Dios nos elige, nos consagra por el bautismo, y tiene para cada uno de nosotros su proyecto para que colaboremos con Él en su Plan de Salvación. ¿En qué nos escudamos nosotros ante su llamada?

¿Cuáles son nuestras resistencias para responder y seguir su proyecto?

Las escusas del profeta se ven desmontadas por Dios y con la imposición de: Donde te envíe irás, y lo que yo te mande lo dirás. La obediencia es requisito indispensable en la misión profética y en el discipulado. ¿Cómo es nuestra obediencia? ¿Vivimos a la escucha de su Palabra? ¿Vivimos el “HÁGASE TU VOLUNTAD” o sólo lo decimos de palabra?

El Señor es fiel y no nos abandona, está con el profeta para librarlo y también con cada uno de nosotros. Nos invita a la confianza y nos asegura que ha puesto su Palabra en nuestros labios y en nuestros corazones.

Por último, el Señor le muestra al profeta la misión: Te establezco sobre pueblos y reyes para arrancar y arrasar, para destruir y demoler, para edificar y plantar. También a nosotros nos pide arrancar y arrasar todo lo que nos impide seguirle fielmente; destruir y demoler los ídolos y las falsas imágenes que tenemos de Dios; edificar y plantar nuestra vida en el único cimiento: Jesucristo (1Cor 3, 11)

La semilla cayó en tierra buena y dio fruto
El Evangelio de hoy está formado por dos partes: por un lado la introducción al discurso parabólico de Jesús que contiene siete parábolas, y por otro, se nos narra la primera parábola que es la del sembrador.

Ésta es una parábola que el mismo Jesús explica en los versículos 18 al 23 de este capítulo 13. Cristo es el sembrador y la semilla es su palabra que Él siembra con abundante generosidad. Nosotros somos la tierra que recibe esa Palabra y sí, la recibimos, pero no siempre la acogemos ni siempre lo hacemos de la misma manera. A veces nuestra tierra está endurecida por los golpes de la vida o la indiferencia. Otras veces está agobiada por los afanes y las preocupaciones y tampoco es bien acogida. Tenemos que procurar vivir más en sintonía con el Sembrador y su Palabra, limpiando y liberando nuestra tierra de pedruscos y malezas, regándola en la oración con la lluvia del Espíritu, y así podremos dar el fruto que el Sembrador espera y desea.

¡¡¡ FELIZ DÍA DEL BEATO CRISTÓBAL DE SANTA CATALINA !!!

Evangelio 16° Domingo del Tiempo Ordinario

Lectura del santo evangelio según san Marcos (6,30-34)

En aquel tiempo, los apóstoles volvieron a reunirse con Jesús y le contaron todo lo que habían hecho y enseñado.

Él les dijo: «Venid vosotros solos a un sitio tranquilo a descansar un poco.» Porque eran tantos los que iban y venían que no encontraban tiempo ni para comer. Se fueron en barca a un sitio tranquilo y apartado. Muchos los vieron marcharse y los reconocieron; entonces de todas las aldeas fueron corriendo por tierra a aquel sitio y se les adelantaron. Al desembarcar, Jesús vio una multitud y le dio lástima de ellos, porque andaban como ovejas sin pastor; y se puso a enseñarles con calma.

Palabra del Señor

Dios no puede ver con buenos ojos como el egoísmo de los hombres ha sido capaz de producir una masa tan grande de gente que no cuenta para nadie. Ni puede gustarle tanto sufrimiento que podría ser evitado. Ni tanto odio asomándose a tantos ojos. Ni tanto muro separando al hermano del hermano. Ni tantos muertos ahogados en el mar de la indiferencia del primer mundo. Este mundo ha llegado a no parecerse mucho a aquél que un día nació tan limpio, del fondo de su Amor.

Tampoco a Jesús le gusta el camino que está tomando los hombres: «les dio lástima de ellos, porque andaban como ovejas sin pastor; y se puso a enseñarles con calma».
Y la enseñanza de Jesús no es otra que optar por el camino de la entrega y del amor. Y para animarnos, Él mismo se pone a recorrerlo. Duro camino el de hacerse puente, para intentar unir dos riberas que se ignoran, o se odian. Y acaba, como era de esperar, muriendo crucificado: «Él es nuestra paz… Reconcilió con Dios a los dos pueblos, uniéndolo en un solo cuerpo mediante la cruz, dando muerte, en él, al odio».

El camino, pues, está abierto, ya todo es posible. Y para, ello, hacen falta ‘cristos’ que, a cuerpo limpio, con los brazos abiertos -en forma de cruz-, vayan cubriendo la distancia que separa los corazones de los hombres, vayan derribando muros y tendiendo puentes, vayan dando muerte en ellos al odio. Aunque acabe costándoles -costándonos- la vida.

¡Feliz Domingo!

Evangelio 15° Domingo del Tiempo Ordinario

Lectura del santo evangelio según san Marcos (6,7-13)

En aquel tiempo, llamó Jesús a los Doce y los fue enviando de dos en dos, dándoles autoridad sobre los espíritus inmundos. Les encargó que llevaran para el camino un bastón y nada más, pero ni pan, ni alforja, ni dinero suelto en la faja; que llevasen sandalias, pero no una túnica de repuesto.
Y añadió: «Quedaos en la casa donde entréis, hasta que os vayáis de aquel sitio. Y si un lugar no os recibe ni os escucha, al marcharos sacudíos el polvo de los pies, para probar su culpa.»

Ellos salieron a predicar la conversión, echaban muchos demonios, ungían con aceite a muchos enfermos y los curaban.

Palabra del Señor

Todas las lecturas de este Domingo se puede resumir en una palabra: «misión». Dios elige a Amós y lo saca de en medio de sus tareas de pastor para que profetice a la casa de Israel. Pablo da gracias a Dios Padre por Jesucristo ya que con Él hemos recibido la gracia de ser hijos y la misión de vivir como tales. Jesús, en el Evangelio, envía a los Doce a predicar la conversión con el único equipaje que su confianza en Él, apoyado por un bastón y unas sandalias, y poco más, ligero de equipaje para que el enviado no se entretengas en «atender» a sus cosas o a emplear el tiempo apremiante de la misión en el.

Enviados con la firme certeza que afirma San Pablo: «hemos sido elegidos antes de la creación del mundo a ser santos e irreprochables ante él por el amor».

La tarea es apasionante, se nos pide ser buscadores incansables de caminos para que no muera el diálogo; artificieros capaces de desactivar todas las espirales de violencia; malabaristas especializados en dar saltos arriesgados hacia la paz; perdedores natos en todas las discusiones… Así se debe comportar los que nos sentimos «elegidos y enviados».

Que no vayamos por ahí poniendo cadenas, sino quitándolas, no fomentando el miedo, sino el amor; no produzcamos tristezas, sino alegría.

Como Jesús. Exactamente como Él. Hasta el último rincón de la tierra.

¡Feliz Domingo!

David Carbonero, Nuevo Hermano Mayor de la Hermandad de la Agonía

En la tarde de hoy, Nuestra Hermandad Hermana de la Agonía ha elegido a su nuevo Hermano Mayor: D. David Carbonero Castaño.

Desde nuestra Cofradía le damos la enhorabuena en la certeza que ambas Corporaciones seguirán caminando unidas.

Nos ponemos a su entera disposición, pidiendo a María Stma Nazarena y al Beato Cristóbal de Santa Catalina que intercedan ante Jesús Nazareno, para que lo acompañen a él y a su Junta de Gobierno pudiendo llevar a término todos sus proyectos.

¡Enhorabuena Hermanos!

Evangelio 14° Domingo del Tiempo Ordinario

Lectura del santo evangelio según san Marcos (6,1-6)

En aquel tiempo, fue Jesús a su pueblo en compañía de sus discípulos.

Cuando llegó el sábado, empezó a enseñar en la sinagoga; la multitud que lo oía se preguntaba asombrada: «¿De dónde saca todo eso? ¿Qué sabiduría es ésa que le han enseñado? ¿Y esos milagros de sus manos? ¿No es éste el carpintero, el hijo de María, hermano De Santiago y José y Judas y Simón? Y sus hermanas ¿no viven con nosotros aquí?»

Y esto les resultaba escandaloso.

Jesús les decía: «No desprecian a un profeta más que en su tierra, entre sus parientes y en su casa.»

No pudo hacer allí ningún milagro, sólo curó algunos enfermos imponiéndoles las manos. Y se extrañó de su falta de fe. Y recorría los pueblos de alrededor enseñando.

Palabra del Señor

¡Con cuánta fatiga la verdad se abre camino entre los hombres! Las lecturas de este Domingo nos presenta a tres personas para la misión: el profeta desterrado Ezequiel, Pablo el que presume de sus debilidades y Jesús, un carpintero, hijo de María y José. Todos experimentan el rechazo de los suyos, sus conocidos, vecinos, conciudadanos.

Es el riesgo que asume Dios al usar la mediación de los profetas. Seguro que el mensaje que quiere transmitirnos no llegará químicamente puro, sino mezclado, empobrecido con la ganga de las limitaciones humanas. Pero Él lo prefiere así. Prefiere que su Palabra llegue a los hombres no dicha desde arriba, a golpe de relámpago, sino envuelta en el ropaje sencillo de una palabra humana.

Existe, el riesgo, de que los hombres, al oír al profeta, se queden en la sola apariencia y no lleguen a darse cuenta de que, dentro de la pobre palabra del profeta, está tratando de llegar nada más y nada menos que la Palabra salvadora del Señor. No es extraño que así ocurra. Pasó con Jesús ¡y eso que era Jesús!: «¿De dónde saca todo esto….?, ¿no es éste el carpintero…? Y desconfiaban del él».

Pero la gloria del profeta es ver la alegría de su corazón agradecido porque Dios se ha dignado usar sus pobres harapos para vestir esa Palabra eterna que está queriendo decir a los hombres.

Dios cuenta con el hombre, ¿no es maravilloso?

¡Feliz Domingo!

Apertura de la Iglesia Hospital de Jesús Nazareno

Desde este próximo viernes y durante los meses de Julio y Agosto, la Iglesia Hospital de Jesús Nazareno seguirá abriendo sus puertas en horario de 11.30 a 13.30 h para que todos los hermanos y devotos que lo deseen puedan visitar y rezar ante Nuestro Padre Jesús Nazareno y su bendita madre, María Santísima Nazarena.

Evangelio 13° Domingo del Tiempo Ordinario

Lectura del santo Evangelio según san Marcos (5, 21-43 )

En aquel tiempo, Jesús atravesó de nuevo en barca a la otra orilla, se le reunió mucha gente a su alrededor y se quedó junto al mar.
Se acercó un jefe de la sinagoga, que se llamaba Jairo, y, al verlo, se echó a sus pies, rogándole con insistencia:

«Mi niña está en las últimas; ven, impón las manos sobre ella, para que se cure y viva».
Se fue con él y lo seguía mucha gente que lo apretujaba.

Había una mujer que padecía flujos de sangre desde hacía doce años. Había sufrido mucho a manos de los médicos y se había gastado en eso toda su fortuna; pero, en vez de mejorar, se había puesto peor. Oyó hablar de Jesús y, acercándose por detrás, entre la gente, le tocó el manto, pensando:
«Con solo tocarle el manto curaré».

Inmediatamente se secó la fuente de sus hemorragias y notó que su cuerpo estaba curado. Jesús, notando que había salido fuerza de él, se volvió enseguida, en medio de la gente y preguntaba:

«¿Quién me ha tocado el manto?».

Los discípulos le contestaban:

«Ves cómo te apretuja la gente y preguntas: “¿Quién me ha tocado?”».

Él seguía mirando alrededor, para ver a la que había hecho esto. La mujer se acercó asustada y temblorosa, al comprender lo que le había ocurrido, se le echó a los pies y le confesó toda la verdad.

Él le dice:

«Hija, tu fe te ha salvado. Vete en paz y queda curada de tu enfermedad».

Todavía estaba hablando, cuando llegaron de casa del jefe de la sinagoga para decirle:
«Tu hija se ha muerto. ¿Para qué molestar más al maestro?».

Jesús alcanzó a oír lo que hablaban y le dijo al jefe de la sinagoga:

«No temas; basta que tengas fe».

No permitió que lo acompañara nadie, más que Pedro, Santiago y Juan, el hermano de Santiago. Llegan a casa del jefe de la sinagoga y encuentra el alboroto de los que lloraban y se lamentaban a gritos y después de entrar les dijo:

«¿Qué estrépito y qué lloros son estos? La niña no está muerta; está dormida».

Se reían de él. Pero él los echó fuera a todos y, con el padre y la madre de la niña y sus acompañantes, entró donde estaba la niña, la cogió de la mano y le dijo:

«Talitha qumi» (que significa: «Contigo hablo, niña, levántate»).

La niña se levantó inmediatamente y echó a andar; tenía doce años. Y quedaron fuera de sí llenos de estupor.

Les insistió en que nadie se enterase; y les dijo que dieran de comer a la niña.

Palabra del Señor

Nuestro Dios es un Dios de vida, que ama la vida y lucha contra la muerte. Y la manera de conectarnos con esta corriente de vida es la fe.

Cristo es una corriente de vida que pasa junto a nosotros. Lleva dentro toda la vida de Dios y quiere comunicarla.

Jairo cayó a los pies de Jesús, rogándole con insistencia que curase a su hija. Luego, cuando le dijeron que la niña estaba muerta, prestó atención a las palabras alentadoras de Jesús: ‘Basta que tengas fe’. Y la tuvo. Fue así como una preciosa carilla de doce años resplandeció de nuevo con todos los colores de la vida. Lo mismo que aquella mujer enferma de hemorragias: se atrevió a ‘tocar’ a Jesús -la fe tuvo en ella más fuerza que el miedo a la ley- y, enseguida, ‘notó que su cuerpo estaba curado’.

Creer en Jesús es, pues, mirarse primero y verse enfermo, y triste, y pobre. Y dejar luego que brote y tome cuerpo en uno la sed de otra agua, el hambre de otra vida. Mirarlo después a Él, escucharlo, sentir que lleva la respuesta a todas mis preguntas, la llave de todos mis anhelos. Poner, finalmente, mi corazón de rodillas y tender hacia Él mis manos suplicantes. En esa medida exacta, en tanto en cuanto sea capaz de vaciarme de mí y abrirme a Él, su agua viva calmará mi sed, su medicina cerrará mis heridas, su Espíritu me llenará con su fuerza. Y entonces, me levantará de la tierra de los muerto, como a la hija de Jairo, para vivir para siempre en la tierra de la Vida.

Hoy el Señor te dice como a esta niña:»Talitha kum», contigo hablo, ¡Levántate!

¡Aleluya! ¡Amén!

¡Feliz Domingo!

Evangelio 12° Domingo del Tiempo Ordinario

Lectura del santo evangelio según san Marcos (4,35-40)

Un día, al atardecer, dijo Jesús a sus discípulos: «Vamos a la otra orilla.»
Dejando a la gente, se lo llevaron en barca, como estaba; otras barcas lo acompañaban. Se levantó un fuerte huracán, y las olas rompían contra la barca hasta casi llenarla de agua. Él estaba a popa, dormido sobre un almohadón.

Lo despertaron, diciéndole: «Maestro, ¿no te importa que nos hundamos?»

Se puso en pie, increpó al viento y dijo al lago: «¡Silencio, cállate!»

El viento cesó y vino una gran calma.

Él les dijo: «¿Por qué sois tan cobardes? ¿Aún no tenéis fe?»

Se quedaron espantados y se decían unos a otros: «¿Pero quién es éste? ¡Hasta el viento y las aguas le obedecen!»

Palabra del Señor

El Evangelio de este domingo que podría ser un relato más para poner de relieve el poder de Jesús sobre el viento y el mar, el evangelista Marcos, quiere que sea un toque de atención, un aldabonazo a la fe de sus discípulos y a la nuestra cuando dejamos que nos abrume el miedo ante tantas tempestades y tormentas que amenazan con hundir la barca de la Iglesia y la nuestra propia: ¿Por qué sois tan cobardes? ¿Aún no tenéis fe?

Hoy el Señor nos recuerda que sigue siendo el dueño y que Él lleva el timón del mundo. Y que a nosotros nos toca confiar y luchar ante las adversidades de la vida. Luchar contra viento y las olas, contra el desaliento y la tristeza, contra el lastre de los propios pecados, contra el ataque de todas las fuerzas del mal que sueñan con hundir algún día esa pobre y molesta barca de Pedro.

Si, a nosotros nos toca luchar apretando los dientes, exactamente como si todo dependiera de nosotros pero sabiendo que todo depende de El. Que Él sigue siendo el dueño del mar y del viento, que Él siempre, siempre está. A nosotros nos toca agarrarnos fuertemente a la oración y confiar, como si en esa lucha, todo dependiera de Dios.

¡Feliz Domingo!

Ejecución Primera Fase de la Restauración del Palio

El pasado 15 de junio, reunida la Junta de Gobierno de la Cofradía, decidió por unanimidad acometer la primera fase de la Restauración del Paso de Palio de María Santísima Nazarena que consistirá en la sustitución de los candelabros arbóreos de la trasera.

Como ya fue presentada en Asamblea Extraordinaria y aprobada por todos los asistentes, la Cofradía acometerá en los próximos años la restauración y enriquecimiento del Palio, comenzando por la sustitución de dichos candelabros por dos juegos de faroles, los cuales han sido diseñados por la familia Valverde (Mariano y Manolo) y serán ejecutados en el taller de Manolo Valverde. Serán realizados en madera de cedro, manteniendo la línea artística y el sello propio del Palio, en caoba y apliques de plata. Cada farol principal nacerá de unas pilastras en sus esquinas, a juego con las capillas de los varales, enriquecidos con apliques de plata y cuatro angelitos cuya terminación será en marfil. Estos faroles principales irán rematados con la Corona Real. Del pie de los faroles principales arranca un brazo hacia una pequeña peana de donde saldrán los cinco brazos restantes, los cuales portarán un farol de menor tamaño ejecutado en iguales calidades artísticas y, rematado con una réplica a la Cruz de Plata que porta Jesús Nazareno.

Dicho acuerdo de ejecución fue formalizado, ante María Santísima Nazarena, el sábado 15 de junio al finalizar la Misa de Hermanos.

Agradecer en especial a la familia Valverde por dar continuidad al trabajo que comenzara su padre, en la certeza de que se sentirá más que orgulloso de que sus hijos continúen con la labor que emprendió como artesano y Hermano Mayor.
Los nuevos faroles serán estrenados, D.m., el próximo Jueves Santo del 2025.

¡Enhorabuena Hermanos!